Molesta- Agotada

No sé si es mala suerte, o yo confabulo contra mi misma cada vez que me enfrento a situaciones como ésta. No me gusta pelear, no me gusta alegar, y las razones ni si quiera las comentaré porque son patéticas.

Este mes ha sido extremo, pero incluso con mi estado Zen mode/on no pude evitar caer un día en la angustia y el círculo vicioso del estrés por certámenes. Nunca pido mucho, pero ese día, joder, solo ese día, pedía que me entendieran. Te pedí que me entendieras. Pero saliste con no se qué cosas que no iban al caso. El problema es que me siento mal porque no hablamos, y sé que si lo hiciéramos tampoco llegaríamos a nada. Seguirías pensando igual y yo seguiría sintiéndome como la mierda.

El caso es que no estás aquí, y sé que no estás en un buen momento para discutir, o para debatir o lo que sea, pero por una vez, por una vez me gustaría tener la razón, me gustaría no sentirme culpable, me gustaría no creer que debo sostener a todo el mundo… y cuando necesito apoyo, siempre hay algo, siempre! por lo que me digo: pero mujer, como vas a pedirle más a N si ya está pasando lo suficiente, anda, no le des más problemas, para que tiene que enterarse de los tuyos…

OK , DIOS me agota tanto sentirme así.

Lo increíble es que quizás ni siquiera tu estas enojada. Quizás ni sabes que yo lo estoy. Espero que lo sepa...

En este momento me acuerdo de una canción que va al caso: http://www.youtube.com/watch?v=FtKBwuOtntw

Estupido-blog diario de vida que jamas leerás.

Decir que algo va a cambiar tu vida no tiene efecto si de hecho, no haces eso que te propones.

...y no hay que tener dos dedos de frente para darse cuenta.

Probabilidades

Estaba pensando en probabilidades. El otro día se me perdió un aro, en el centro de Concepción… así que después de una ardua búsqueda di por perdido el dichoso aro. Pero, por esas cosas de la vida, volví sobre mis pasos, y lo encontré, ahí, tirado y medio pisoteado, pero ahí estaba. Si eso pasó, ¿por qué no habría probabilidades de que pasara algo como eso pero a gran escala? ¿Que impide a la vida ser maravillosa? ¡Nada! Solo se necesita un poco de suerte y abrir bien los ojos para ver donde pisas, para ver lo que hay a tu alrededor, ¿cómo sabes que la probabilidad, ese 0,00001% pasa caminando al lado tuyo?

Círculo Vicioso

Estoy aquí sentada en mi cama pensando en que tengo los brazos abiertos a la vida, a que me pasen cosas. Por un segundo, creo que no estoy atada a nada y a nadie. Pero mientras escribía eso, vinieron a mí un batallón entero de pensamientos aterradores sobre tantas cosas que debo, no debo, puedo o no puedo hacer. Y vuelvo al círculo vicioso del miedo y del ocio. Por un segundo, un pequeño y diminuto segundo pensé que era libre. Un solo segundo… pero wow, que maravilloso segundo.

Reset

Todo lo que está en mi cabeza, está mal. Tengo que reiniciar mi cerebro. Empezar a pensar de formas diferentes, no tan cerradas, no tan limitadas, no tan mías. Compartir puntos de vista, ver que no todo es tan negro, o blanco o multicolor. Darse cuenta que hay más modos de hacer las cosas, modos más eficientes, mejores de los que he usado en mi vida.

Reiniciar, porque ser yo, no está dando los resultados que deseo, porque temo vivir, porque temo al rechazo, a la soledad, a no cumplir las expectativas. Reiniciar para empezar a vivir en función mía y no de los demás. Reiniciar para conocer, para aprender, para amar, para vivir.

Reiniciar. Comenzar.

Tiempo

Y el tiempo no pasa. Sigue ahí, estancado. Son las cuatro con cinco de la mañana y el reloj me mira de reojo, como esperando mi reacción. Esperando que mueva un músculo, que respire demasiado fuerte. Y es tan increíble como todo en un minuto se puede ir al carajo. En un miserable segundo puedes ver cosas que jamás quisiste ver, cosas que jamás debiste ver.

El reloj bosteza, también está aburrido, tampoco se comprende, quiere avanzar, pero, de verdad , ¿habrá alguna diferencia cuando sean las cuatro con seis? ¿Dejaré de sentirme igual? No, el minuto puede detenerse, puede avanzar, o el tiempo podría volverse de cabeza, y las cosas jamás dejarían de ser lo que son.

Your face- Bill Plympton

un grandioso corto del señor plympton